Olascoaga, un cálido día de sol y la ceremonia anual de la Pachamama con un querible Máximo Coñequir como persona central de este evento, donde se dio cita un importante número de personas y la presencia de distintas autoridades municipales, incluso hasta un periodista de canales nacionales conociendo características de nuestra idiosincrasia. Muy buena organización y hasta aquí todo bien.
Según versiones, promediando las 17.00 hs. una mujer es víctima de una descompostura que se sospechó desde un principio podría ser un ataque al corazón y aquí es donde comienzan a surgir incógnitas acerca de ciertas cuestiones relacionadas con el estado de las Salas Periféricas, ambulancias y elementos.
Nuestro pueblo (Olascoaga), tiene una Sala de Primeros Auxilios de la que estamos orgullosos en cuanto a la parte edilicia y su mantenimiento por parte de quien allí trabajan, pero de un tiempo a esta parte es vox populi que disminuyo su capacidad de asistencia porque ha ido decayendo la entrega de insumos y son momentos como los vividos el domingo 5 lo que detonan ciertas realidades y nosotros como ciudadanos empezamos a preguntarnos si la salud en los cuarteles ocupa un lugar de interés en la ciudad cabecera, si los insumos y elementos con que cuentan son los que corresponden, si está bien que a la ambulancia se le dé otro uso que no sea el de traslado de pacientes, si la ambulancia está equipada con todos los elementos para una atención estandarizada, si el médico a cargo de las CAPS las recorre periódicamente y realiza las observaciones e informes correspondientes.
Y desde el desconocimiento, pero tratando de recurrir a la lógica, el domingo pude ver que hasta el predio ceremonial tuvieron que trasladar un tubo de oxigeno de grandes proporciones y peso (en vez de uno portátil), que carecían de desfibrilador, capacitación del personal estable en su uso y seguramente alguien con los suficientes conocimientos en medicina podría acrecentar esta pequeña lista, como que tampoco se utilizó la ambulancia local para el traslado de la persona.
Que se entienda claro, el motivo de esta nota es para tratar de minimizar las posibilidades de muerte como final de la historia y ver qué podemos hacer desde nuestro lugar como ciudadanos, organizarnos y colaborar para la compra de elementos tecnológicos que ya resultan indispensables en localidades que quedan prácticamente aisladas en días de lluvia intensa o que por la premura de la necesidad sea indispensable cuando es cuestión de minutos la posible solución y para que no quede en el aire la pregunta ¿Podría haberse salvado esa vida?
